No sé, tengo la necesidad de escribir en todo momento, siempre se me van ocurriendo cosas y más cosas, y alguna más por ahí quedará seguramente. Creo que lo necesito, que me hace ser quien soy, que me forma como persona. Alguien me dijo una vez que mis heridas me habían hecho así, y que por ello mismo mis pensamientos y relatos tenían una profundidad diferente a la de otros. El sufrir, llorar y aprender me ha hecho diferenciarme de los demás, ver el prisma desde otra perspectiva, supongo que tenía razón. Yo sólo sé que no puedo evadirme de mi vida, no puedo dejar atrás todo lo que viví, porque es lo que soy, sin mi pasado no habría llegado hasta aquí y no sería la misma, así que en todo caso, sólo puedo decir que para algo sirvió. Así soy, por lo que fui y por lo que viví, y a partir de esta persona crearé mi futuro.
Eso es lo que me lleva a mi siguiente dilema. Cuanto más cosas veo, pienso y discuto, más cuenta me doy de que aunque la universidad me gusta, los compañeros son geniales y el futuro que me espera tilda interesante, más ganas tengo de huir y vivir otra vida. Es complicado, pero siento que este mundo me queda grande, que tengo otro lugar que me está esperando pero que no tengo el valor para ir a por ello. Supongo que toda mi vida he estado haciendo lo que se esperaba de mí, lo que tocaba, siempre he sido una hija modelo, una buena estudiante, puntual, respetuosa, educada... ahora tengo ganas de volar, de correr, de gritar. Creo que el hecho de dejar el lastre de mi padre atrás ha abierto una nueva vía que me incita a escapar de este mundo pensado y decidido de antemano. Tengo la sensación de que podría aprender más de la vida en 1 año viajando, escuchando y fotografiando, que durante 20 años estudiando en una universidad. Tengo la sensación de que es como una jaula en la que todo está pactado y estamos siendo como zombies hacia un lugar a la deriva, sin sentido. Me siento presa de mí misma y mis decisiones. Mi parte racional no para de decirme que es lo que está estipulado en este mundo; para ser alguien tienes que aprovechar tu nota de corte y estudiar una carrera, acabarla, hacer un máster... pero mientras hago eso soy como feliz a medias; mi parte idealista me grita que por una vez tenga valor de romper las reglas y vivir mi vida, aunque supongo que mi parte realista me recuerda que no tengo dinero para vivir esa vida. En lo profundo de mi alma ahora lo que más me gustaría sería dejarlo todo, incluida mi casa, mis amigos, mi vida... absolutamente todo, y viajar primero a Italia y luego a Andalucía, allí me quedaría un tiempo en Lanjarón y en Granada, y posiblemente después me iría a Egipto, Siria y Argentina. Yo, mi portátil, muchos folios, un bolígrafo, mi diario y mi cámara. Creo que no necesitaría nada más que eso... pero la vida no siempre nos da la oportunidad de salir corriendo a hacer lo que realmente deseamos, porque vivir vale dinero y además hay reglas, y personas, y... un montón de problemas que sobrellevar. Además no quiero decepcionar a mi madre, ella no se merece una hija irresponsable que deje ir su futuro y se joda la vida, y yo supongo que tampoco me merezco serlo, pero... sinceramente a veces mataría por dejar de ser políticamente correcta, por una vez me encantaría ser totalmente egoísta, fugarme y no volver en 2 años, recorrer mundo, vivir mi vida, ser libre... y darme tiempo para echar de menos esta vida, querer volver, o definitivamente aceptar que esto no es lo mío y que sólo me obligo a seguir porque creo que es lo correcto, pero no lo que me hace feliz.
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