jueves, 3 de noviembre de 2011

Mentes criminales III

Si luchas contra monstruos, ten cuidado de no convertirte en uno de ellos.
Si miras siempre al abismo, ten cuidado que el abismo no entre en ti.

Cuantos más capítulos veo de esta serie más me gusta, cuantas más cosas pasan más aprendes y más piensas en la vida, en lo que haces y en lo que puede pasar, piensas en tus sentimientos, en lo que sucede mientras tú duermes o mientras respiras. ¡Cómo de dura puede ser la vida, cuánto daño podemos hacer y cuánto consentimos sin hacer nada al respecto!
En este capítulo en que he visto hoy puedes ver que la muerte no siempre viene por gente borracha, psicópatas o hijos de puta con muy mala hostia. En demasiadas ocasiones viene de la mano de gente con problemas psicológicos, personas a las que la sociedad ha dado la espalda y los ha condenado o personas que después de un gran trauma emocional y una herida demasiado grande que nadie ha curado se vuelven contra ellos mismos y contra el mundo. Hoy sencillamente era una madre que perdió a su hijo en un accidente de coche, el trauma psicológico que eso le causó la ha llevado a atentar contra la vida de muchos policías, que representaban el cuerpo que - a su parecer - no fue capaz de salvar a su hijo, al igual que su marido, un bombero que salvaba vidas pero que no fue capaz de salvar a su hijo. ¡Joder! Te hacen pensar en muchas cosas y plantearte muchas más.

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