lunes, 2 de agosto de 2010

Amor.

¿Me estás tomando el pelo no? ¿Ahora te vas a poner a hablar de mariposas en el estómago, cuentos de hadas y finales felices? ¡Venga ya! ¿Desde cuando? Tú nunca hablas de esas cosas, no eres de esas chicas que se ponen vestido y sonríen con suma facilidad cuando algo que ocurre las pone nerviosas. Tú no sueñas con principitos, ni piensas en historias felices, ni en parejas de ensueño... tú eres una chica interesante, sexualmente activa, que no le tiene miedo a casi nada, segura de ti misma, y muy convencida de que te gustan los tíos. ¿Desde cuando sueñas con fantoches subidos en un caballo blanco? ¡Vamos hombre! Sé realista, esto no es más que una fachada, ¿verdad? Esto es un artículo, una columna... sólo quieres hablar de algo que está presente en la vida de miles de personas, pero que tú tampoco valoras mucho. ¿O sí?

No me mires con esos ojos. ¿Acaso es pena, tristeza? ¿Por qué? No entiendo nada de lo que está pasando, sólo estoy intentando hablar contigo de manera sincera, como siempre lo hacemos. Te estoy haciendo daño, y lo veo en tus ojos, lo siento aquí... al mirarte, pero no entiendo el porqué. ¿Sabes? Siempre creí que te conocía a fondo, que sabía perfectamente como eras y que querías en tu vida, y ahora estoy confuso, intrigado. Te miro y me da la sensación de que esa chica que tengo delante de mí no es la misma que yo creía ver todos estos años, que esta chica segura y asquerosamente decidida que lo tenía todo clarísimo, no es esa pequeña y débil chica que me mira con unos ojos llenos de lágrimas casi suplicando un abrazo. Entonces... ¿Quién eres? ¿Por qué me has mentido todo este tiempo? ¿O es que yo no supe mirar y ver, no supe darme cuenta de qué era tu personalidad real y qué era la burbuja? Lo siento. En serio lo siento. Creo que me he pasado todos estos años creyendo saber y no me he dado cuenta de que cuanto más me enorgullecía de lo mucho que sabía, menos cuenta de me daba de lo que en realidad pasaba.

Eres independiente, pero lo suficientemente frágil como para necesitar en todo momento a alguien que esté contigo. Eres segura y fuerte, pero también débil, y cuando te hacen daño y te derrumbas necesitas que te recuerden lo mucho que vales para no hunirte. Tienes mucho futuro y crees en ti, pero necesitas a los que quieres para compartir esos logros, sin ellos nada de lo que haces te vale la pena. No te avergüenzas de tu cuerpo pero tampoco te exhibirías, puedes mirarte en un espejo pero cuando estás delante de otros te pasas minutos mirándoles y pensando que sentirán al verte, si tendrán reparos al mirarte o si incluso les dará asco tu cuerpo. Por muy guapa que en ocasiones te ves, otras pagarías millones por esconderte y no salir en años, te sientes inferior aunque siempre trates de ocultarlo. Estás orgullosa de tu familia y amigos, y son ellos los que realmente te importan, pero en el fondo te preocupa muchísimo lo que piense la gente y te afecta cantidad la opinión que los demás tienen de ti, intentas llevarte bien con todo el mundo y como nunca lo consigues te sientes fatal y frustrada, porque nunca te dan esa oportunidad que desearías. Te llevas mejor con los chicos que con las chicas, y tienes miedo constante a que el comentario desafortunado que hizo tu madre una vez se haga realidad en palabras y en cualquier momento un chico te diga que te aprecia de esa forma porque te ve como a un amigo más, como a un chico, en lugar de como a una chica. Intentas luchar por mil cosas que te impoirtan, entre ellas la sexualidad, de la cual tantos se avergüenzan, pero te da miedo que ser tan abierta en esos temas con tus amigos les haga tener una imagen de ti muy diferente a la real. Por muy sexual que seas, te has pasado la vida buscando ese amor, y ese chico, y esa historia... eres romántica como pocas y cariñosa, siempre esperas mimos de todos los que quieres y te entristece no recibirlos. Te hace sentir aislada y poco querida por las personas que más te importan, tener que irlos a buscar siempre hace que pienses que te medio aceptan, pero que si fuera por ellos jamás irían a buscarte para que tú les dieras cariño.

¿He dado en el clavo? No me gusta verte llorar... y lo que más me entristece es pensar en todas las personas que al igual que yo, tendrán esa imagen de ti, tan segura, tan espontánea y decidida, y que nunca mirarán más allá, como yo he hecho esta vez, y verán a la única y verdadera: NEUS.

1 comentario:

Ramón Mejía dijo...

¡Wow!
¡Qué regañada te acaba de dar tu consciencia!
Es bueno tener momentos de reflexión sobre uno mismo...
Felicidades por ese valor.

Gracias por pasarte por mi Blog...
Te cuidas mucho eh.
Un beso!

SOBRE EL CONTENIDO

No se permite la reproducción total o parcial y en ningún soporte y para fines comerciales, de ninguno de los textos de esta página, sin que medie la autorización del autor. Los textos de esta página son para uso personal de su autor, y en caso de que terceros los utilizaran total o parcialmente en cualquier publicación venal (bien virtual o por cualquier otro medio presente o futuro) se citará siempre la autoría y la fuente original, creando si fuere posible, un vínculo a la misma.Todo el contenido literario de este blog, salvo indicación expresa que se haga, es propiedad de Neus Cámara Gutiérrez.2009.