Lo mejor: el humor y los dos pollitos llamados Carlos y Felipe.
Un conejo animado como protagonista, James Marsden como coprotagonista y David Hasselhoff como secundario de lujo.
La historia del conejo de Pascua, un chico joven que no encuentra su sitio en el mundo, una familia divertida, problemas padre e hijo, un pollito soberbio y con ansias de poder, música, diversión y muchas risas. No es la mejor película del mundo, pero sinceramente en una tarde tranquila en la que no sabes qué hacer, puedo recomendar que la veas, quizá no en el cine (debido principalmente a los precios ascendentes a que nos vemos a diario), pero es entretenida, y al fin y al cabo esa es una de las funciones más básicas del cine. Entretener, divertir, evadirnos de los problemas reales, pero también representar la realidad y a la vez nuestros sueños o fantasías más disparatadas.
Sinceramente: una divertida película para ver, a los críos les encantará; los adolescentes se sentirán identificados y los adultos pueden volver a la niñez y verse reflejados en los "padres" de la peli. Cuando la veas, dime qué te pareció, de las opiniones ajenas también se aprende.
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